Mi dilema existencial
Por: Capitán Seba
He vivido una vida divertida. Me he dedicado a joder, ligarme mujeres, beber y deprimirme cuando pierde LeBron una final o cuando pierde el Real Madrid. Gracias a Dios, he tenido una vida saludable y de muchas bendiciones. Sin embargo, en los últimos días una de mis mejores amigas cumplió 20. Ahí fue que caí en cuenta que al tener la misma edad que ella, ya pronto me pondría viejo y cumpliría 20 también.
Me azotó muy duro esa noticia. Me di cuenta que los pocos meses que me quedan de juventud debo aprovecharlos al máximo. Uno nunca sabe cuando le toca morir, y como bien sabemos cada año que pasa es equivalente a acercarse a la muerte. Solo Dios sabrá cuando moriré, pero presiento que se acerca el momento.
Al parecer yo vivía en un viaje mental de que era Peter Pan. Pensé que toda la vida iba a tener como 15 años y podía ser charlatán. Desgraciadamente nunca encontré al País de Nunca Jamás o mejor conocido en inglés como "Neverland". También fracasé como Juan Ponce de León en encontrar la fuente de la juventud.
Entonces, en qué quedamos. Quedamos estancados en un universo que nos lleva hacia la vejez y nos impide vivir en la juventud. Ya tengo 20 desgraciadamente, ahora ya empezaré a aplicar para el seguro social y empezaré a meterme Viagra para ver si se me para. Empezó la era de la vejez del Capitán.
Debo recalcar algunos logros de mi juventud, entre ellos: conseguir un diploma de cuarto año, dormir en un banquito en Nueva York, clavarme a una dominicana en un putero, echarle pastillas de ADHD a una iguana y terminar debajo de un puente. La última siendo la más memorable.
En fin, cumplí 20 estoy viejo con cojones y ya tengo barriga de borrachón. ¡Hoy vamos pa'l putero!